En Amazon sabemos que nuestros clientes, empleados y colaboradores no solo quieren que contribuyamos a la conservación de nuestro planeta, sino que esperan que seamos un líder en sostenibilidad y conservación del planeta. Los vehículos de cero emisiones, y especialmente los camiones, juegan un papel clave en este ámbito. La actual revisión de las normas sobre las emisiones de CO₂ de los vehículos pesados en la UE es una oportunidad crucial para establecer el rumbo hacia la descarbonización de la logística.
En el marco de The Climate Pledge -nuestro compromiso de alcanzar las cero emisiones netas de carbono para 2040- apostamos por apoyar nuestras operaciones en una flota de reparto que nos ayude a alcanzar estos objetivos. Hemos ayudado al despliegue de miles de furgonetas eléctricas en Europa por parte de nuestros colaboradores de reparto y, en 2022, empezamos a utilizar vehículos eléctricos pesados de 40 toneladas (HDV) en el continente. También estamos utilizando métodos de transporte alternativos, tales como bicicletas de carga y scooters eléctricas, para entregar paquetes a clientes en toda Europa.
Sin embargo, la red de transporte sigue siendo una de las áreas que presenta mayores retos para nosotros en nuestro camino hacia las cero emisiones netas de carbono. La razón principal es que los vehículos pesados de cero emisiones, todavía no están disponibles a gran escala, y su adquisición supone un coste muy elevado para muchas empresas. Actualmente, un camión de 40 toneladas y de cero emisiones requiere de una inversión que multiplica de dos a tres veces la de un vehículo diésel convencional. Además, la infraestructura para apoyar su funcionamiento es insuficiente. Por eso, debemos ser ambiciosos en esta área. A finales de 2022, anunciamos planes para invertir más de 1000 millones de euros en los próximos cinco años para electrificar y descarbonizar aún más la red de transporte europea. Utilizaremos esta inversión para llegar, como mínimo, a las 10 000 furgonetas de reparto eléctricas y más de 1500 vehículos pesados eléctricos.
No obstante, está claro que para que el sector del transporte adopte plenamente los camiones de cero emisiones, los transportistas deben poder operar eficazmente y que, con el coste que supone adquirir el vehículo, la tecnología debería ofrecer una flexibilidad y disponibilidad similar a la de los vehículos impulsados con combustibles fósiles. Los operadores deben ser capaces de programar y planificar rutas sin problemas y, al mismo tiempo, descarbonizar de forma rentable, ambiciosa y progresiva. También deben estar seguros de que los vehículos sin emisiones podrán operar en todo el mercado único de la UE, y que la infraestructura de carga rápida estará ampliamente disponible. La innovación y la escala, con un marco europeo regulatorio sólido, serán esenciales para lograrlo.
La necesidad de ser ambiciosos desde el principio
Los objetivos a largo plazo para la descarbonización total para 2040 o 2050 son muy importantes pero, para cumplir con este desafío, necesitamos establecer objetivos intermedios.
El objetivo actual de la UE es que, para 2030, los camiones matriculados en ese año deberían emitir un 30 % menos que los registrados en 2019. Creemos que este objetivo se debería incrementar en al menos un 50 %, y que mantener el objetivo del 90 % para 2040 es fundamental para fomentar la innovación en el transporte por carretera, con los vehículos sin emisiones como pilar.
En un marco tan ambicioso, la cooperación público-privada es esencial, especialmente para reducir los riesgos asociados a la adopción de nuevas tecnologías. Tenemos indicios alentadores, por parte de los fabricantes, que nos hacen confiar en que habrá amplia disponibilidad de vehículos pesados sin emisiones. Y en Amazon estamos dispuestos a trabajar estrechamente con la industria del transporte, los reguladores y la sociedad civil para que la transición se produzca lo antes posible.